A tu regreso,

Si te fuiste, cual efímera brisa del ocaso

opaco húmedo del sol marchito

que derramó la sabia de mi cuerpo

ahogándolo en lo profundo del abismo...

Si te fuiste, borrando huellas del camino

que tomabas aferrándote a ideales y falacias;

si te fuiste, a esos brazos que tantas

veces traicionado te dejaron,

y tus ojos retornaron a sollozos tan deseados.

…y ahora, aproximar tu negro vuelo pretendes,

zampando las migajas que dan vida a mi razón,

deseando que yo caiga como siempre

a la orden de mi pobre corazón.

Si te fuiste dejando exhausto todo alrededor

hoy las manijas del reloj ya están a tiempo

corren deprisa recuperando anhelos

desconocidos a tu lado;

¡Y hoy soy más feliz!, al no querer dejarlo...